El Atlético de Madrid anunció en marzo de 2015, hace año y medio, que el compromiso con el entrenador más exitoso de la historia del club se extendía hasta 2020, cuando entonces su contrato era solo hasta 2017.
La idea era que el preparador estuviese incluso entrenando al equipo en el nuevo estadio, en la 17/18. Claro, el acuerdo tenía trampa porque Simeone se reservaba la posibilidad, anualmente, de desvincularse del club abonando una cantidad o de si llegaba la selección argentina y él entendía que era el momento de dar el paso según publica Mundo Deportivo.