Partido grande en el Camp Nou, esos que busca el aficionado en el calendario. Los Barça- Atlético, y viceversa, se han tornado en otro clásico de nuestro fútbol que no desmerece al clásico por antonomasia. Es más, acostumbra a superarlos en calidad de juego, aunque tengan una dosis de morbo menor, porque a las dos aficiones les une el mismo enemigo deportivo.
Fue el primer gran cartel del curso 2016-17 que llegó con el estreno de la temporada de otoño, en noche aún de temperaturas altas que permitían sandalias y calzones cortos en las gradas. Todo a pesar de ese horario impune de las diez de la noche de inicio en día laboral que castiga al currante. El horario, empero, no fue óbice para que casi 90.000 personas se congregaran en las gradas, atraídas por el imán del espectáculo presentido.
Los «memes» no se han hecho esperar y ya lucen por las redes sociales: