Sergio Ramos compareció tras la victoria ante el Manchester City y el pase a la final de Milán, ésa que repetirá el derbi de hace dos años en Lisboa. El capitán blanco, quizá conocedor de lo importante que es también el prepartido con los micrófonos delante, aprovechó para lanzar un dardo al vecino colchonero. A Ramos no le gusta que se diga que el Real Madrid es un equipo de señores frente a un conjunto obrero como el Atlético de Madrid
«[Esa visión] es difícil de cambiar. La opinión de cada uno es respetable. La realidad a veces es distinta. Nosotros vamos a salir con la misma humildad que ellos, aunque lo vendan de otra manera», comentó en referencia a la mística que rodea el sacrifico colchonero y su trabajo constante sobre el terreno de juego.
Un Atlético que entrena Simeone. Hace no mucho, dijo Ramos de él que no le gustaba su victimismo. Luego Simeone respondió afirmando que le encanta Ramos y que lo querría siempre en su equipo. Ante esas palabras, Ramos destensó sus declaraciones.
«Me alegra que diga El Cholo que quiere un Ramos en su equipo. Le he deseado lo mejor, pero en la final somos rivales».
