Además, el fichaje de Morata por el Chelsea solucionará el problema del nueve en el club inglés. Costa sobra y su llega a Madrid es cuestión de tiempo. El futbolista ya ha dicho por activa y por pasiva que quiere jugar en el Atlético e incluso se le ha visto bromear con la camiseta del Atlético, mandando otra señal inequívoca de cuál es su destino.